Cierra los ojos.
¿Qué ves?
Siente lo que pasa por tus pies.
Ahora puedes volar.
Observa los montes, las colinas,
Ese río de agua cristalina.
Y esas flores tan hermosas,
que se están alimentando en la orilla.
¿Las has olido?
Tienen un aroma embriagador.
Ahora, puedes abrir los ojos.
Caminar y apreciar la naturaleza a tu alrededor.
Los edificios y la gente.
Estás en otra jungla
de cemento y ladrillo.
Corres y luchas.
Algún día,
abrirás los ojos al levantarte
y volverás a ver, sentir y oler.
Ese paisaje.
Capea